El hígado humano está compuesto por unidades funcionales llamadas lóbulos, que son esenciales para el papel del hígado en el metabolismo, la desintoxicación y otros procesos vitales. Un lóbulo hepático se puede dividir conceptualmente en tres partes principales o regiones, cada una con componentes y funciones celulares distintas:
1. ** Zona periportal (zona 1) **:
- ** Ubicación **: Esta región se encuentra cerca de los bordes del lóbulo del hígado, adyacente a las venas centrales.
- ** Componentes celulares **: Contiene hepatocitos (células hepáticas) que están bien abastecidos con oxígeno y nutrientes de la sangre entrante. Estos hepatocitos tienen una alta actividad metabólica.
- ** Funciones **: Esta zona está involucrada en la síntesis de proteínas plasmáticas, como la albúmina y los factores de coagulación, y juega un papel importante en el metabolismo de los fármacos debido a su rico suministro de enzimas.
2. ** Área midzonal (zona 2) **:
- ** Ubicación **: Esta área se encuentra entre las zonas periportales y pervenidas.
- ** Componentes celulares **: Contiene hepatocitos que se suministran moderadamente con oxígeno y nutrientes.
- ** Funciones **: El área midzonal es menos especializada en comparación con las zonas periportales y pervenosas, pero aún juega un papel importante en varios procesos metabólicos.
3. ** Zona pervenive (zona 3) **:
- ** Ubicación **: Esta región se encuentra más cercana a la vena central dentro del lóbulo.
- ** Componentes celulares **: Contiene hepatocitos que reciben la menor cantidad de oxígeno y nutrientes. Estos hepatocitos a menudo son más susceptibles al daño de las toxinas o la falta de oxígeno.
- ** Funciones **: Esta zona es crucial para el desglose de la insulina y el glucagón, y también juega un papel clave en la eliminación de drogas y toxinas de la sangre.
Comprender estas tres partes ayuda a comprender las funciones complejas del hígado y cómo las diferentes áreas responden a diversas condiciones fisiológicas y patológicas.